Julio ha sido un mes de mucha actividad.
Creo que los peces se alegraron de volver a verme.
Tuve una experiencia agridulce mientras nadaba de regreso. (“Nadaba de regreso” significa que la pila de la cámara se agotó y por eso no pude obtener una imagen de lo siguiente). Pude acercarme mucho a un Piquero de Patas Azules flotando en el agua. Tienen picos largos y poderosos, así que no quería que me picoteara. Estaba emocionada de poder tocarlo, pero la razón fue desgarradora. Su pie estaba enredado y atravesado por al menos dos de los anzuelos de un gran señuelo de pesca. El pájaro me dejó manejarlo, después de volar y regresar, y solo hizo una mueca cuando manipulé suavemente su pie tratando de encontrar una manera de ayudarlo. No tenía forma de cortar las púas o cortar los anzuelos del señuelo o al menos cortar el hilo de pescar que todavía estaba sujeto. Fue devastador para mí tener que alejarme sabiendo que el pronóstico no era bueno para el ave. De hecho, nadé de regreso a él dos veces más tratando de ver algo que pudiera hacer por él. Incluso le pregunté a la gente en la playa si alguien tenía una herramienta que pudiera usar, pero fue en vano.
Hoy he estado reflexionando sobre Hebreos 12: 1: “… despojémonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia, y corramos [volamos] con perseverancia la carrera que tenemos por delante”. (NVI) Estoy seguro de que el pájaro no era consciente del peligro de acercarse al señuelo o de cómo su pata se enredaba cada vez más. Ahora era consciente del dolor que le estaba causando el señuelo, pero es posible que no se hubiera dado cuenta de lo mortal que era la situación. Esto me recuerda lo que nos hace el pecado. Nos atrae como un señuelo, y podemos ignorar cómo nos enredará y conducirá al dolor y la devastación. Para el no creyente enredado en el pecado, Dios hizo la provisión para la libertad a través de la muerte y resurrección de Su Hijo, Jesús. La gracia de Dios se aplica mediante el arrepentimiento del pecado y la fe en Jesús. Para el cristiano que se enreda en el pecado, 1 Juan 1: 9 dice: “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad”. (NVI) En ambos casos, debemos estar de acuerdo con Dios en que el comportamiento lo ofende y que, en Su fuerza, le daremos la espalda. ¡Alabe a Dios por su perdón y porque nunca se aleja sin poder ayudarnos!
Creo que julio ha sido el peor mes para los casos de COVID entre los de El Faro, por eso seguimos usando Facebook Live y Zoom. Todas mis actividades regulares continúan y se han agregado más. A partir del 17 de agosto, el plan es reintegrar la parte de enseñanza a nuestra reunión de mujeres, así que estoy revisando los materiales y reflexionando sobre cómo llevar a cabo la reunión. Esto también implica reanudar la clase de formación de maestras y su preparación. Dado que un par de mujeres del grupo no tienen la capacidad de unirse a Zoom, planeo llevarles la enseñanza siguiendo todos los protocolos. Esto significa que nos reuniremos afuera en el calor y la humedad, así que estoy muy agradecida por sus oraciones en todas estas actividades.
Con la finalidad de que El Faro comenzara un ministerio de grupos pequeños, los pastores me pidieron que trabajara en traducir materiales y adaptarlos a nuestra situación. Actualmente estamos considerando en oración quién dirigirá ese ministerio, así que por favor oren para que el Señor nos guíe en ese proceso de selección. Al terminar el proyecto para implementar los grupos pequeños, lo presentaría para su consideración al equipo de liderazgo y al líder del ministerio. El objetivo seria debatir, afinar y luego comenzar a implementarlo. Las cosas aquí se mueven a un ritmo lento, por lo cual probablemente será una petición de oración durante mucho tiempo, pero por favor oren para que resulte un ministerio de grupos pequeños sólido y que se reproduzca.
Eso les da mucho por lo que orar. Muchas gracias por su colaboración en el ministerio aquí.
Juntos en el ministerio,
Brenda
